LA APARICION DE UN ESPIRITU en la calle de la amargura

Ilustración Jose Guadalupe Posada

SENSACIONAL NOTICIA

En la Calle de Amargura de esta Ciudad, núm. 10 1/2 tuvo efecto el suceso que vamos a referir.

La vivienda núm. 100 de la misma, se halla gabitada por la familia Gambino compuesta de cuatro personas que son D. Luis Gambino, su hijo José Rosario, Mariano Pérez, pariente y Dolores Gambino de Gil viuda y hermana de D. Luis. Desde hace muchos años esta señora profesa las doctrinas espíritas, no obstante la oposición de toda su familia. Pues bien, el Lunes 16 del presente mes de Febrero de 1903 como á la una de la mañana, los inquilinos de la referida casa se despertaron sobresaltados por terribles gritos que venían de la vivienda núm. 10, en la cual tuvo lugar el acontecimiento. Como era natural todos los vecinos dorman profundamente. El joven José Rosario que dormía en la recámara, fué de repente despertado con indecible susto sin saber la causa de ello. Entonces pudo distinguir un resplandor desconocido para él. lo que hizo aumentar su temor. Por de pronto se figuró que aquella luz era de la luna, pero comprendiendo luego que el cuarto no tenía ventana ni claraboya alguna , por donde pudiese penetrar, tembló lleno de pavor. Inconsciente dirije la vista á los pies de su cama y entonces con gran pánico pudo divisar la casi vaporosa figura de un fraile. Quiso José gritar y no le fué posible. Se imaginó ser victima de atroz pesadilla: tomó los cerillos, y encendió la vela que tenía sobre su buró. La aparición se acentuó más á la luz de la vela: su hábito era de un color indifinible y el rostro como de un anciano, ostentando un cráneo enteramente calvo.José hizo un supremo esfuerzo para no caer sin sentido y dándose ó fingiendo más bién todo el valor posible se atrevió á preguntar: ¿Ha vd equivacado el cuarto? ¿Qué busca, quién es? por donde entró? el aparecido no respondió. Entonces el joven mencionado quiso levantarse del catre, más el fraile con un ligero impulso volteó el lecho. José exhaló un grito horrible y quedó privado. La luz se extinguió y todo quedó en profunda oscuridad. Al ruido del catre volcado y de la exclamación de José despertó la familia sobresaltada y acudió al cuarto encendiendo velas. Todavía estava en aquel lugar la brumosa forma del fraile. Al verle todos sintieron el extraño calosfrio del pavor, á excepción de la Sra. Dolores G de Gil que manifestó verdadera calma: después todos los de la familia pretendiendo hacer acopio de valor preguntaron á la aparición el objeto que allí le llevaba, El espitiru no contestó. ..

Imprenta Vanegas Arroyo. Aprox año 1900. México DF

Vincent.D.H